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¿Cómo puedo escribir en la paredes
partituras de músicos excelsos
o versos exquisitos con dos dedos
y escuchar tal vez
las notas más profundas
de un bosquejo?
El artista es tangible en la palabra
cuando escribe inquieto
y raíz del verbo en la mañana,
es la flor del pensamiento
y es mensaje en algarada,
cuando tiene sentimiento
es a veces la voz más liberada
o el campo azotado por el viento.
El artista suelta voces en su intento
y subasta a diario sus tristezas
en ajenas algaradas.
Bebe vino en ocasiones y en otras
copas de las verdes regiones del suplicio,
es rey de la alegría pero llora sus fracasos
y a veces ríe como niño.
He visto triunfar aristas del pincel y
también fracasar a artistas antes blasonados,
en el canto, en la pintura, en redondeles
y hasta en el cinematógrafo se leen
biografías pasquinadas por la tristeza,
por el éxito, por la risa y por el llanto.
Y siembra su simiente y entre tanto
si el artista peca atribulado
sus andanzas del todo callejeras
y escribe sus versos de poeta
nos regala entonces su pecado
y su comedia integra de a de veras.
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