Era tan poquita cosa,
estaba tan hecha trizas,
que no importaba nada,
ser hoja seca y pisada.
Mi sed de amor, de cariño,
era tanta que vi todo,
en una simple visita,
y era tiempo que te sobraba.
Hoy sé con mas certeza,
que soy lo que encuentro,
entre mi pecho y espalda,
corazon roto que no te duele,
que ni la molestia te tomas
de saber como sigue mi alma.
El tiempo pasa, todo cambia,
el cuerpo encuentra su paz,
escapa del dolor cuando ataca,
pero el alma ¡ay el alma!
Llora de soledad y pena,
por haber sido burlada,
por haber creido en el amor,
por haber caido en la trampa.
Por creer en la amistad,
por haberte abierto mi casa,
por creer que tenia un amigo,
y que lejos me arropaba.
Pero no es asi, solo hallo,
silencio, desden, desprecio,
pisotones en la cara, quizás
quede poco, el tiempo pasa.
El cuerpo cambia,
el peso baja,
todo esta bien?,
pero yo sé que avanza.
Adiós, por siempre adiós,
paredes viejas de mi casa,
en ella tuve de todo,
al final solo tengo escarcha.
|