Anoche cuando el sueño aún no llegaba
cuando esperaba que mis ojos se cerraran
apareció una silueta y escuché una voz
me llamó suavemente por mi nombre
iluminando mi ventana con una tenue luz.
Escudriñé las sombras un tanto sorprendido
tratando de encontrar explicación a este suceso
una cálida brisa invadió de pronto los rincones
inundando el aire con susurros y perfumes
se rompió de pronto la habitación en mil pedazos
y el cielo se extendió como un manto de colores.
Estaba la luna llena con su corona de plata
y las estrellas danzaban vestidas de resplandores
escuché las notas dulces de una especial sinfonía
sentí que comenzaba a elevarme en el espacio
siguiendo los compases de violines celestiales.
Entonces pregunté; ¿adonde voy, estoy volando?
como una melodía la respuesta llegó dulce a mis oídos
las palabras que escuché de emoción me estremecieron:
“te llevaré de viaje por universos y parajes fabulosos
no tengas miedo, hoy quiero que seas mi invitado
soy el amor, descubrirás que puedes vivir tu propio sueño,
es algo que logran los que están realmente enamorados”.
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