Caminamos juntos por calles y avenidas
nos vio pasar la luna y el sol de mediodía
con nuestro amor locamente desbordado
al sentir tu piel ardiente y besar tus labios
descubrí el secreto para detener las horas
en cada caricia y en la tibieza de tus brazos.
Ha sido hermoso revivir tanta ternura
comprobar que la pasión solo dormía
que una mirada puede abrir los cielos
y lograr sin alas, remontar el vuelo.
Fue un oasis de amor en nuestras vidas
cobrar la deuda al tiempo y la distancia
encontrarnos nuevamente y ser felices
después de sufrir nuestra triste lejanía.
Hoy te extraño y me haces mucha falta
me duele una vez más sentir tu ausencia
si tú quieres búscame por las avenidas
allí estaré porque he dejado mi alma…
en Arequipa, la ciudad de mi esperanza.
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