Con mi alma conmovida por los hechos
te doy gracias Señor por lo que hiciste
porque estaba sumergido entre las sombras
y pude ver la luz cuando la aurora no llegaba
cuando el dolor ya era insoportable
pude entender que mi cruz ya no pesaba.
Te doy gracias Señor por la esperanza
aquella que siempre estuvo de mi lado
por tantas veces que clamé tu nombre
y por todas las respuestas que me diste.
Has llenado mi vida de abundancia plena
sin darme una montaña de riquezas
he comprendido que no son tan necesarias
cuando tú estás presente en nuestra vida.
Hoy logré por fin la paz que yo anhelaba
después de años de buscar por los caminos
ahora sé que eres tú quien me levanta
cuando muchas veces de bruces he caído.
Gracias Señor por tu amorosa compañía
en mis noches oscuras de fiebre y de delirio
enciendes el sol y dominas las tormentas
siempre traes el calor de un nuevo día.
Finalmente gracias Señor por estar cerca
por perdonar mis pecados y mis faltas
me has enseñado que el amor no se improvisa
que es cosecha de sembrar con sacrificios
de vencer nuestras miserias y flaquezas
hasta encontrar la verdad y la justicia.
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