Si tienes del color las capitales
y fulgurosas luces tempraneras
que fueran del jardín siempre primeras
pasiones ardorosas y abismales.
No escondas tras de ti esas señales
que te darán las recias primaveras
en la cumbre do siempre tú generas
muchas voces de cantos generales.
Sea tu faz de aquellos antifaces
de diametral distancia y pinturera
que esconden las vertientes aurorales.
Subirán las faenas que tú haces
al carro de la feria pajarera
de luces conspicuas… teologales.
|