Los juegos - Prosa poética
Cuando éramos niños jugábamos a patear el bote,
a los encantados y a las estatuas de marfil. El burro
castigado era pasatiempo favorito de los adolescentes
y la gente grande jugaba naipes. Hoy jugamos a
ver pornografía en la televisión. Algunos curas a
abusar de los menores de edad y la venta de substancias
nocivas vino a substituir al juego de las canicas. En
lugar de trompos y yoyos usamos pistolas de alto
calibre y mucha gente juega así a privarse de la vida.
¿Cuándo volveremos al juego de respetarnos y querernos?
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Julio Serrano Castillejos
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Publicado el: 01-05-2010
Última modificación: 00-00-0000
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