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¿Qué más tendremos que ver?
El dolor de los padres y la familia
es infinito... no es sólo sentir
la angustia por el secuestro de los hijos,
de un familiar; es recibirlos sin vida...
Seres malditos, sin entrañas
que no les tiembla la mano
para cegar la vida de inocentes,
no sin antes torturarlos cobardemente...
Matarán sus cuerpos pero no sus almas...
es lo que me repito para aferrarme
a la Fe... pero sólo soy humana...
y se me revuelve todo ante acciones
tan abominables y salvajes
¿Qué más va a acontecer
en un país sin respeto?
sin justicia, sin ley
-sólo la que conviene imponer-
donde la tierra está manchada
con la sangre de tantos inocentes
y a nadie parece importarle...
Van los pasos insomnes
hacia un lado
y la mirada húmeda
no tiene norte...
Porque no hay derecho a vivir
tanta crueldad,
tanto salvajismo,
tanta injusticia...
¡¡¡No hay derecho!!!
Que no se merezca el ser humano
un mínimo de respeto;
que no se tenga derecho a la vida.
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