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De nuevo la lluvia
arrasa con todo,
se torna en tempestad, furia...
Desoladora, inclemente....
si no se detiene
no existirá ni el presente
Lluvia que anega,
que ahoga y desborda
ni siquiera ve lo que se lleva
Truenos, relámpagos
que asustan y arrancan
hasta el llanto...
Duele tanto dolor
sin explicación a la vista,
ni lógica, ni razón que nos asista.
Duele que no haya amor.
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