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Hoy,
frente a ti me encuentro,
tratando de mirar tus horizontes...
Hoy,
quiero pensar que tú,
no eres sólo tú...pero
¿Por qué estás triste?
¿No crees que es mejor pasar de largo?
¡No, no eres sólo tú!
Quizá te suene raro,
pero...¡las cosas son asi!
!Suceden simplemente!...
Luego,
se marchan,
dejan huella,
recuerdos, olvidos...
Y alguna lágrima furtiva.
Si,
mi buena amiga,
normalmente las cosas,
ni son verdad, ni son mentira,
¡son las cosas, así, sencillamente!
Quisiera que asomaras tu ser a mi corazón!
y leyeras una gran pancarta,
que tengo escrita para ti,
es quizá mi credo más puro:
¡Creo profundamente en todo ser que vive,
en la belleza de las cosas!.
¡Creo en la duda,
como el único resquicio
de razón que existe!
¡Creo en el amor,
como el más simple y llano ejemplo
de la razón de ser!
Quizá, esta vieja y rota pancarta,
no te diga nada.
Quizá pienses que las pancartas también son cosas...
Quizá.
¡Quizá a lo mejor la lees y te gusta!
Si fuera así,
Te la regalo,
para que la guardes en aquel rincón,
donde tienes tus cosas más humildes,
tus recuerdos de siempre.
(En especial para Mary Carmen, amiga)
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