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SONETO
CONFUNDIR VIRTUD CON EL PECADO
El saber se convierte en un combate
desde luego mortal de vida o muerte,
donde ya juega su papel la suerte
de quienes dan primero jaque mate.
Y ese sería el único acicate
que actúe de secreto contrafuerte,
a no ser que el destino me despierte
metido en algún necio disparate.
Lo que se da hoy, en vida se recibe,
ya sea más temprano o bien más tarde,
sabiendo que las deudas del pasado
olvidar la conciencia lo prohíbe,
aunque la mente muestra gran alarde
al confundir virtud con el pecado.
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