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SONETO
PARA HACER EL CAMINO MÁS LIVIANO
Para hacer el camino más liviano
de recuerdos descargo yo la mente,
hasta pegarme golpes en la frente
para que el truco nunca quede en vano.
Igual podría parecer tirano
que al ego lo maltrate de repente,
cuando nada resulta coherente
acabar con el pelo todo cano.
Porque patria no tengo yo ninguna
a gusto me paseo por el mundo
como veleta azul que lleva el viento,
sin que persiga gloria ni fortuna
sino de veras un amor profundo
por el sol que me llena de contento.
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