ENÉADA
MALDITA SEA
Ratas de laboratorio y carne de cañón somos
si a la vista estamos viendo, maldita sea los comos
nos consideran juguetes de su colección de cromos.
Si a costa de nuestras vidas, muchos se hacen millonarios
mejor calculemos bien los posibles escenarios
en los cuales al redil vayamos de voluntarios.
Quien sabe si bajo cuerda, hoy nos meten la vacuna
y mañana yo diría, sin esperanza ninguna
nos hemos de encomendar, sólo a la diosa fortuna.
|