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SONETO
LA LEY DE LA SELVA
Con las bolsas repletas de dinero
muchos patriotas cruzan la frontera,
ojalá que se vean en la acera
sin pan como cualquier sutil ratero.
Que imputados están, hoy día, pero
bien vacía que exhiben la chistera,
que lícito en aquellos días era
el cobrar comisión al mundo entero.
Fácil que los delitos hoy prescriban
porque obviando la ley alguna trampa
a quienes la suscriben favorece,
y tanto que a los débiles derriban
mientras la norma de la selva campa
si quien delinque buen perfil ofrece.
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