SONETO
SIETE VIDAS
Si de la cándida razón humana
la voluntad se toma vacaciones,
mejor me agarre bien a mis talones
no sea que el perfil me salga rana.
Y es que retroceder de mala gana
mandaría al garete mis razones,
con las que yo cotejo los follones
como puedo de forma austera y sana.
Pues de fórmulas sabias no dispongo
según las directrices recibidas
por mi madre al sacarme de la cuna,
si no fuera que alerta mi mondongo
como los gatos tiene siete vidas,
por cierto, que de fábula ninguna.
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