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SONETO
Son las presiones las escusas locas
que matan de repente los amores,
llenando la cabeza de temores,
y a buen seguro, el corazón de rocas.
Será que ya no existen las bicocas,
que mostrando con luces sus colores
de en medio van y quitan los factores,
cuando disculpas hoy esgrimen pocas.
Así los matrimonios duran poco,
por más que los bendiga el mismo papa
tomando a Dios por único testigo,
cuando si en sus creencias pone el foco
ninguna conjetura se le escapa
ni tan siquiera el orco del castigo.
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