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SONETO
CENSURA
Si confiscar pretenden mis palabras
conmigo la censura que no cuente,
porque aunque puedan resonar macabras
jamás me iré a callar aunque reviente.
Igual lo digo estando muy caliente,
viendo como persiguen los fiscales
a todo el que se muestre irreverente
al senil proceder de los mortales.
Que si acaso no fuéramos iguales
interpretarlo a medias ya podría,
si es que en boca de muchos cardenales
libertad de expresión jamás habría.
Quiera Dios que termine la censura
y la verdad se imponga llana y pura.-
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