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HOMBRE DE PAJA...
Hombre de paja fue siempre mi padre
a diario trabajando como un burro,
temiendo en su pensar cualquier descuadre
que pudiese ocurrir siempre en el curro.
Que siendo un dócil animal de carga
no cabía en su mente la protesta,
por más que su existencia fuera amarga
nunca se planteaba una respuesta.
Será que con el látigo educado
en su mente cuajó la dictadura,
que ni siquiera estando jubilado
quiso modificar su compostura.
Quizás por eso nunca de modelo
me sirvió, ni tampoco de consuelo.-
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