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SONETO.-
Nunca podría parecernos lindo
que obvie la sociedad tantos valores,
cuando al gran capital se rinde honores
bajo la sombra atroz del tamarindo.
Yo por seguir luchando no me rindo
sin venerar banderas ni colores,
mostrando mi versar de mil amores
con lo cual si lo logro ya me blindo.
Mal hacemos a diario permitiendo
hoy que la dignidad nos desvalije
un sistema que vende democracia,
mientras tanto todos vamos muriendo
porque la ley de aquesta vida fije
sus propias normas sin maldita gracia.
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