Nunca sea mi destino
otro que encontrar la paz
sin dejar de ser tenaz
siempre estaré en el camino.
Claro que me gusta el vino
pero también soy capaz
de quitarme el antifaz
sin perder jamás el tino.
Si aquí estamos de paso
no valdrá nunca la pena
el amargarse la vida
haciendo ni el menor caso
al que siempre nos condena
ni que en sueños me lo pida.
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