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SONETO.-
Hasta el último día yo sentí
tus entrañas vibrar junto a las mías,
sintiendo como a tope me querías
desde el primer abrazo que te di.
Y consecuente soy que te perdí
al colmar tu razón de fantasías,
queriendo hacer valer filosofías
en las que nunca coherencia vi.
Negar no puedo más tanta evidencia
si al final no coinciden los caminos
y el amor que feliz sedujo, muere.
Que los cargos enquisten la conciencia
llenando de dolor nuestros destinos
por más que el corazón se desespere.-
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