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Soneto.-***
Nunca espero a la orilla del camino
que los perros me laman las heridas,
porque encontrar encuentre otras salidas
que suavizar suavicen mi destino.
Pues tampoco es que pierda mucho el tino
imitando quizás a los suicidas,
porque siendo también un buscavidas
soy de aqueste planeta su inquilino.
Y no espero que nadie por las buenas
me saque las castañas ya del fuego
si un beneficio fácil no obtuviere,
tanto que apostaría mis melenas
por conservar intacto algún apego
hacia quien hoy de mí razón espere.-
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