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Soneto.-
Buen pagador no necesita prenda
ni por supuesto aquí, ninguna fianza,
pues contando con toda su confianza
no requiere que nadie le defienda.
Tal vez su forma de pensar atienda
al respetar según la vieja usanza,
cuando afrontar deudas con tardanza
suponía la cárcel para el menda.
Hoy día existen muchos atenuantes
dependiendo del juez que en suerte toque,
cuando no, del favor de los padrinos,
cuyo poder supere a los infantes
cambiando de lugar cualquier enfoque
e incluso el estupor de los vecinos.
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