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SONETO.-
Si tuviera la clave del sosiego,
quien sabe si del cuento viviría
soñando que la gloria fuera mía,
aunque sea del todo medio ciego.
Porque también mi libertad delego
cuando carente viva de alegría,
creyendo que muy cómodo sería
dejarse alimentar en el talego.
Pero de la codicia soy esclavo
y víctima locuaz de la cultura,
de la cual detestarme no consigo,
pues cada dos por tres solo me trabo
porque la insensatez no tiene cura
y hacia la tumba voy sin un amigo.-
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