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Rodeados de piojos y miseria
no hace falta ninguna cárcel, veo,
porque sin duda alguna, ya lo creo,
en bolas nos veremos en la feria.
Igual nos entra sin razón la histeria
al ver el panorama más que feo,
pues si estamos a punto del cabreo
rompérsenos podría alguna arteria.
Gozar apenas hoy nos costaría
de salud y dichosas intenciones
que ojalá compartirse se pudieran,
porque de mil amores yo lo haría,
tanto que aunque me falten los millones
lo que gano me cabe en la cartera.
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