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Si amnistían a quienes más al fisco
defraudan, y cortan la cabeza
del que investiga, dios, con sutileza
a los corruptos, fácil se arme un cisco.
A los que desayunan con marisco
y a buen seguro, la mejor cerveza,
muy poco les importa la pobreza,
y menos que se tiren por un risco
los que gritando piden un mendrugo
que llevarse de veras a la boca,
mientras que quien derrocha el presupuesto
sin prejuicios se paga un buen verdugo
porque a quitarse los problemas toca
y cuanto les resulte algo molesto.
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