EL TRABAJO NO DIGNIFICA AL HOMBRE
Sentirme agradecido pues no puedo
viendo que el curre me ha servido
para tener conciencia de tullido
al vivir destrozado por el miedo.
Si por dejar mis pieles por el ruedo
me fuera a manejar favorecido
mejor permanecer quieto en el nido
que no sufrir con semejante enredo.
Pues trabajando siempre como un burro
para sólo afrontar las hipotecas
amargo sabe el pan que a la barriga
llega, siendo la víctima de un curro
del quien llora con lágrimas muy secas,
ni logra que se olvide la fatiga.
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Publicado el: 23-07-2011
Última modificación: 00-00-0000
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