Cuando los ojos íntimos del alma
pasean su mirada de hijo avieso
sobre el silencio que parece en calma
muy pronto a mis orígenes regreso
Porque siendo este cuerpo quien la palma
parece extraño que se lleve el beso
cuando no es la razón quien se desalma
ni es para los sentidos un progreso
No quisiera inquietar tenso la muerte
pasando de la euforia al desencanto
y convertir mi vida en un infierno
Por todo lo que ayer creía suerte
era comodidad lejos de encanto
hoy se vuelve temor hacia lo eterno.