Siendo el primero que se alegra
en rendir honores a la cosecha
como en arrimar el hombro a la brega
ya muestro buena cara cada mañana
sin contar con tiempos mejores
obviando amores y riquezas
qué otros beneficios requiero
coser y cantar todos a una
no hay otra vida que tanto precie
Y aún siendo el último conforme
ya me gustaría un canto a la vida
libre de trabajos y exigencias
tratando de ser desobediente
pero como bien rezan mis huesos
cuánto esfuerzo podría ahorrarme
si pudiera poner voz a los deseos
de cuánto sueño no sacaría provecho.