Que alivio
saber que comparto contigo
en sueños
el alimento del alma
saber que puedo mostrarme
desnudo y sin traba ante tus ojos
sin afrena ni sospecha
Qué consuelo
saber que vivo de ilusiones
y a ese anhelo
tú le das vida
con tu abrazo infinito
Qué suerte
saber que fueras para mi piel
lo eterno de mi existencia
que hasta logro convencerme
si la felicidad no me hiriera
de tanta dicha nunca saciarme
|