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Hoy como nunca
me reconozco sobre mis pasos
al rescatar de mis raices
aquellas semillas llenas de vida
adormecidas entre nubes y el tiempo
y como salido del miedo
volver a escribir mi libro en blanco
ensayado tantas veces entre sueños
Tampoco es tan distinto sentirme amado
para respirar en libertad
la parte de aire que me toca
sin tener que abandonar
la comodidad de mi cueva
como si fuera lo más trascendente
de mi presencia sobre esta galaxia
Y sin embargo
sigo tocando a la puerta
de quien me aseguro ausente
para evitar la diferencia
y descansar con el deber cumplido
de no andar salvando el pellejo
continuamente.
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