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Amigo, tengo el alma trastornada,
sigo andando por la vida descalza,
entiendo que nada es mejor ni peor,
la malo es aferrarse a la nada.
El placer está pariendo dolor,
hoy me da vida y mañana me mata,
mientras intento escaparme de él,
tira de mi, cuanto mas huyo mas ata.
A veces creo que solo soy piel,
aún asi ella grita, susurra y ama,
cada poro vomita lo que siente,
cada entrega un SOS, que reclama.
Déjame contemplar, amarte dormido,
antes de que el sol de nuevo nazca,
mi tarde amasijo de hierro escapa,
déjame que al abrigo de tu calidez,
vuelque todo amor y dolor escondido,
solo asi aligero un poco mi carga.
Sabiendo que amar no es querer,
que repartes amor por donde pasas,
mas una partición es solo eso,
no totalidad que todo lo aplaca,
que teniéndola ceden las ánsias.
Mas somos terrenales,
y nuestras flaquezas,
torturan, dominan,
debilitan, y atascan.
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