Las queridas mascotas
son hermanos menores.
Con su percepción y amor
se entregan sin restrinciones.
Lo que no alcanza la vista
ellos muy bien lo detectan
avisándonos con sus actos
con lealtad y nobleza.
Nos dan lo mejor de ellos
sin esperar recompensa,
son fieles y amorosos
los menores...los hermanos.
No debemos subestimar
el potencial del amigo,
tan solo le falta hablar
aunque a veces no es preciso.
Tan solo con la mirada
nos abren a un mundo distinto
donde no existe el rencor
obviando toda tristeza.
Mi mascota es un felino
manso y bueno como pocos,
me acompaña donde voy
y se integra bien conmigo.
Es mi más fiel compañero,
su amor es corespondido
por el mio que desborda
comprensión y mucho cariño.
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