Llegaste de puntillas
casi sin enterarme
y adornaste mi dormida ausencia
como luz que adorna el nuevo día.
Dejame ahogarme
en el lago de tus besos
y entibiar mi corazón anhelante
en la templanza de los recuerdos.
Tú me has enseñado
lo que es amor...y amar.
Tú me has dado fe
en el nuevo día,
tú mi ilusión renovada.
Tú mi nombre oculto
quien ilumina mi camino
y me muestras las estrellas
rutilantes de mi universo.
Siempre tú, mi amor,
eternamente tú...
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