En mi alma yo llevo la sonrisa,
que se oculta en mi rostro alguna vez.
Al igual que la dulce y suave brisa,
que se siente en la cara y no se ve.
De esa forma me gusta refugiarme,
con mi risa muy dentro de mi ser.
Porque nadie jamás podrá matarme,
la alegría que logro mantener.
Muy adentro de mí constantemente,
aunque a veces me vean suspirar,
es que habito en un mundo diferente,
donde muchos jamás, podrán llegar.
Es por eso que siempre me sonrío,
ante hechos, que matan el amor.
Porque adentro de mi, existen ríos,
placenteros de paz y de ilusión!
|