Saber decir adiós a aquellos seres
que de veras amamos en la vida.
La madre que se va sin despedida
porque la muerte llega cuando quiere.
Y sentir el dolor que tu alma hiere
en un país lejano sin la visa
para llegar a ella, con la prisa
de decirle al oído que la quieres.
Decir adiós a los buenos amores
que llenaron tu vida de ilusiones
y se marchan un día de repente.
Los amigos que siempre te ayudaron
y hoy ausentes ya no estan a tu lado
decir adiós ¡es cosa de valientes!
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