Seor, hoy te canto y te agradezco
con todo mi corazn,
la salud, la fortaleza
que le has brindado a mi hermano
para salir airoso
de ese trance tan amargo
en el que acrisolaste su fe,
su amor y su esperanza en ti.
Oh, Seor de los Ejrcitos,
Oh, Seor del Universo.
Bendito y alabado seas.
Bendita tu misericordia,
Bendito seas, mi Dios.
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