Después de romper hay caparazones,
caparazones de no dejar entrar a nadie,
caparazones de ver la vida de otro modo,
caparazón de decir lo que piensas
haciéndote creer cosas.
Después de enjambres divergiendo hay calma,
calma de corazones que laten fuerte,
calma de no dormirte en esta parálisis,
calma de llorar en silencio,
calma para dejar de ser tu mismo.
Después de convivencia pensable inquebrantable,
pensable es querer no sentir lo que sientes,
pensable es no actuar como quieres,
pensable es olvidar,
pensable es necesitar a alguien.
Caparazón es este poema que entremezcla,
y distorsiona sin que yo entre
a lo que de veras quiero expresar.
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