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Eres.
Se me están cerrando las puertas
Siento que la soga que me sostiene
Se transforma en hilos
Y pronto visitaré el suelo,
Tal vez vuele, no lo sé,
Y no sé si todavía me sienta independiente
Pero nunca quiero sentirme liberado
De ti, tu que eres mi collar de brazos,
Las cuentas son tus besos y caricias,
Tus miradas son a mis fuerzas
Cadenas perpetuas, tus ideas,
Son el claustro a las mías
Y tus soslayos son martirios inquisitorios.
Necesito estar muerto, para
No darme cuenta que me haces falta,
Darte todo lo que te pertenece
Y aún en la tumba mis huesos
Vueltos polvo desearán tornarse
Alfombra en tu camino.
Se me esta acabando el tiempo y el espacio
Para decirte
Que eres el timón de mi barco,
Mis aguas tranquilas, mi ancla,
Mi vela, mi soporte, mi guía y mi destino,
mi aliento, la esencia de mi sangre,
el latido, mi parpadeo, el sueño de infancia,
mi trote, el ritmo de mi existencia,
la inocencia ebúrnea,
mi espejo, mi luz, el cristalino velo
del futuro, mis ansiedades, mis suplicios y mis lloros,
mi océano, el todo de mi vida,
lo que yo estaba esperando
y que acabo de encontrar.
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