Yo le pregunto al viento tu nombre,
la respuesta aún no la recibo;
no sé si eres mujer o acaso un hombre,
hoy vives en el vientre de quien te concibió.
Yo le pregunto al viento dónde estás,
me responde que por todo el mundo.
Pues bien, dónde estés, dónde te gestas,
dejo aquí, para tí, estos pensamientos profundos.
Yo le pregunto al viento si serás feliz,
en el mundo tan complicado que hemos creado,
si irás por el buen sendero o por un desliz,
en una sociedad abierta y todo globalizado.
Tú eres inocente, la culpa es nuestra,
por desgracia no hemos entendido la lección;
el viento calla, tu nombre no me da como respuesta,
espero que de algo te sirva mi modesta reflexión.
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