Llegue a tu vida
como pluma
volando con el viento
despacio,
sin ruido
poco a poco
fui cayendo
Tus manos me tomaron
suave
con el tiempo
refugiándome en ellas
con calma
sin miedo.
Noches de sueños
días
de encuentros
convirtieron en deseo
la sensación
de
ir
cayendo.
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