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Este poema es parte de una historia de amor...que es actual y muy hermosa.
Tomé tus manos y comprendí que no era un sueño
estuve allí para hacer realidad aquel encuentro
contemplé tu sonrisa y de tu boca robé un beso
juntos descubrimos el poder de una caricia,
recuerdo que hablamos de nosotros, del futuro...
supimos que se puede construir sobre las ruinas.
Porque fuimos la esperanza que renace inmaculada
después de tantas sombras, desilusión, penas y lágrimas
las palabras y el amor fueron uniendo las cadenas
que hoy dulcemente han enlazado nuestras vidas.
El camino fue sombrío, pedregoso y muchas veces triste
pero nadie dijo que ser feliz se consigue fácilmente
desde el cielo una luz nos guió en cada jornada
abriendo las ventanas de nuestros sentimientos.
Hoy se cumplen cuatro años desde que miré tus ojos
y supe que mi barca debía anclar en aquel puerto
detener el vuelo de gaviotas siempre errantes
tejer un nido con la paz y la dulzura de tu alma
para calmar la furia de tormentas y de vientos.
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