Le escribí a Macarena
unos versos en el mar
y grabados en la arena
hoy me hicieron suspirar
por la huella tan profunda
que en mi ser lleva ya impresa
su mirada que me inunda
y su boca que está inmersa
en mi alma de alegría
que ilumina con sus ojos
mis anhelos, mis antojos
y además un nuevo día.