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Gracias Dios mío por amarme tanto
Gracias por el amparo que me das
Gracias por la salud y por el llanto
que muchas veces me toca derramar.
Gracias por los obstáculos que vida
me pone en el camino de repente
por ellos mismos estoy consciente
que puedo caminar fuerte y erguida.
Gracias por hacer que yo comprenda
que solo el amor nos lleva a ti.
Gracias, por mantener firme las rindas
de mi existencia, con el buen fin.
Gracias por mi familia, mis amigos,
por este año pasado que dejara
algún pesar en mí que despertara
ese Gigante que siempre va conmigo.
Y ese eres Tú que me das fuerzas
para seguir adelante en esta vida
pues no pienso darme por vencida
Contigo no existe quien me venza.
Gracias por el año viejo que se aleja
apresuradamente en el cual aprendí
que compartiendo penas junto a ti
nadie pudo escuchar de mí una queja.
Gracias por estar de mí pendiente
y trazar con tus manos mi camino.
Gracias Padre, Maestro, dulce Amigo,
Rey de Reyes, Humilde, Omnipotente.
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