Esparciendo tristeza en el camino,
la felicidad no llega al destino,
debo coincidir que huí de Dios,
y me siento dentro de una ballena.
En oscuridad de luna vuelta sangre,
en el desierto sin pan ni agua,
como niño destetado de una madre,
como Job tocado por el diablo.
Estoy lejos de todo,
lejos hasta de mi mismo.
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